sábado, 29 de julio de 2017

PSICOPAÍS 4: NOS VOLVIMOS PROSTITUTAS



Comienzo saludando a algunos venezolanos, quienes se hallan atrapados en el pasado reciente de nuestra situación, que no notaron que con una moneda subsidiada no teníamos acceso real a los objetos y placeres con los cuales nos hemos estado fotografiando, y es que los oigo hablar: “Antes me iba muy bien, compré carro, apartamento, viajaba fuera del país al menos una vez al año y no me cabían las compras en las maletas, pero ahora la vaina está terrible…” y me preocupa porque cada vez que uno de nosotros abre la boca, lo hace en nombre de todos, y me asusto porque después de esa frase viene una sacudida como: “por eso no me he podido divorciar, es complicado porque tengo que dividir todo eso entre dos y ¿cuándo se vuelve uno a comprar todas sus cosas?” Me tomo la libertad de leer entre esas líneas, que usted vive y puede que comparta su cama y su cuerpo con una persona a quien no ama y tal vez aborrece, sólo por interés económico, por no tener la mitad, por no “ser” pobre y, ante esta hipótesis se me hace la imagen de la prostitución. Según RAE, Prostitución es la actividad de quien mantiene relaciones sexuales con otra persona a cambio de dinero (con el debido respeto a las personas que se dedican literalmente a este oficio).
Resultado de imagen para personas caricatura para colorear mujerDe vez en cuando escucho relatos como: “yo no me complico, la paso bien, si me quiere regalar cosas, invitar a viajar o a comer, pagarme un tratamiento de estética, que lo haga, no le estoy obligando; paso el rato y ya, me imagino que esa persona está clara que nada que ver, no le estoy ofreciendo nada serio”. Ideas mías quizás, pero yo al escuchar eso pienso que usted es alguien que finge para que la otra persona se sienta complacida y le recompense con dinero, entonces, de inmediato, otra imagen de prostitución es la que percibo y, no sólo me llama la atención quien hace eso, sino quien deja que le traten así, ambos participan en este maltrato.
En estos días he estado atenta a aquellos “acuerdos” que hacemos para que alguien nos saque de este país, algunos dicen que se enamoraron con un par de sesiones de cyber-sex, otros engañan a una supuesta víctima que “cae” en el juego pero luego “se quita la careta” y es una persona violenta o decepcionante, otros pagan para casarse con alguien que luego reclama otros derechos que no estaban previstos, en fin, la imagen se repite.
Problemas así nos están pasando, pero le hablo a quienes desean que esto tenga un desenlace diferente, a quienes no se ponen a la defensiva con esta opinión sino que humildemente se ven reflejados en esto que sin haberlo deseado nos atrapa, a quienes dudan que algo así les haya sucedido o les esté sucediendo y a quienes se preocupan por los males individuales que producen calamidades colectivas… Sólo a ustedes les hablo, sólo a ustedes les aseguro que las cosas pueden cambiar y que una de las soluciones es buscar ayuda con un profesional de la Salud Mental.

Analeda Regalado Betancourt
@consultamental - Venezuela