PERFIL PSIQUIÁTRICO DEL ABUSADOR

PERFIL PSIQUIÁTRICO DEL ABUSADOR.

CONFERENCIA DICTADA 03/10/17

CURSO – TALLER DE MANEJO INTEGRAL DEL ABUSO SEXUAL EN NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES.

El abuso sexual infantil se define como todo acto de naturaleza sexual impuesto por un adulto a un niño o adolescente, (entendiendo por estos actos a conversaciones, miradas, visualización de imágenes impresas, digitales o por observación directa; tocamiento, frotación de los genitales o region anal;  penetración de objetos, dedos o el órgano genital masculino en boca, vagina o ano; hacer que el menor realice estos actos con su órgano genital en el adulto, etc) con o sin su consentimiento (el menor de edad no cuenta con la madurez  emocional, cognitiva y a veces ni siquiera física para que pueda tener validez algún tipo de consentimiento), usando o no la fuerza, las amenazas o la sugestión y valiéndose de la ventaja de poder y dominación que puede tener el adulto o el joven mayor sobre la vulnerabilidad y la dependencia del niño o adolescente.

El abusador según la mayoría de las estadísticas elige víctimas del sexo femenino pero algunos estudios recientes han reportado mayor incidencia en varones a los cuales se les ha preguntado si tuvieron este tipo de experiencias en su infancia y adolescencia, esto, nos hace reflexionar acerca del hecho y se puede pensar que las denuncias más frecuentemente realizadas son acerca de casos en en niñas pero que niunguno de los dos géneros está protegido de ser víctima. Algunos reportes señalan que cerca del 20% de mujeres y 8% de hombres tienen este terrible hecho en sus historias de vida.

Los abusadores sexuales suelen estar relacionados con el niño, bien sea por consanguinidad, poder, responsabilidad o algún tipo de autoridad; ser amenazantes, intimidantes, tener cómplices en el mismo entorno del niño y no necesariamente son hombres, pero sí lo son en su mayoría y pueden ser personas con algún tipo de enfermedad mental o cerebral (impulsivos, adictos, enfermos orgánicos, trastornos de personalidad, etc), ser delincuentes o, tener ambas condiciones simultaneamente. Existe un aspecto importante cuando pensamos y trabajamos con este tipo de adultos y es que, en su mayoría son personas que han sido víctimas también de abuso y maltrato en su infancia o juventud, y que como seres humanos enfermos o maltratados deben ser manejados si su caso particular lo amerita. Se entiende la molestia que esto ocasiona al lector pero son realidades muy cercanas a todos nosotros que deben ser atendidas desde el punto de vista integral y multidisciplinario y, aún mas sabiendo que el 99% de los abusadores pertenecen al entorno cercano del niño y muy posiblemente tengan sentimientos involucrados con la víctima y su familia que, tal vez, por sus problemas y su historia de vida sean cómplices de este hecho que muchas veces se repite a lo largo del tiempo sin que nadie tome medidas ante la culpabilidad, la vergüenza y el temor que estas personas hacen sentir a sus víctimas y al entorno familiar.

Cuando atendemos en la práctica clínica a los grupos familiares, muy frecuentemente nos damos cuenta de que estos hechos ocurren como una maldición a varias personas y varias generaciones en la misma familia y se ha guardado como un secreto que varios familiares incluso se llevan a la tumba y, que por creer en mitos (como que los niños y jóvenes son provocadores y mentirosos o, que estos casos son infrecuentes, imposibles entre gente querida o sólo de clases sociales bajas) no estamos haciendo lo adecuado que es demostrar al niño que le queremos, que le creemos, que le defenderemos y sea quien sea el abusador lo denunciaremos. De esa manera se puede detener esta maldición.

Existen opciones conjuntas entre la Psiquiatría y la Legislación de manejar estos casos de la mejor manera en el momento en que ocurren y, cuando la historia de abuso ha acompañado por largo tiempo a la persona y no ha dejado que exista plenitud y bienestar en su vida personal, amorosa, social, sexual, emocional, familiar: la Psicoterapia con profesionales de la Salud Mental debidamente capacitados es una gran elección.

No podemos cambiar nuestro pasado pero sí podemos entender lo que nos ha ocurrido para poder sanar y tener un futuro libre y felíz. Busca ayuda, no estás sólo y no eres el único…

Analeda Regalado Betancourt

Médico Psiquiatra – Psicoterapia de Apoyo

San Cristóbal – Venezuela

@consultamental

PSICOPAÍS 4: NOS VOLVIMOS PROSTITUTAS

Comienzo saludando a algunos venezolanos, quienes se hallan atrapados en el pasado reciente de nuestra situación, que no notaron que con una moneda subsidiada no teníamos acceso real a los objetos y placeres con los cuales nos hemos estado fotografiando, y es que los oigo hablar: “Antes me iba muy bien, compré carro, apartamento, viajaba fuera del país al menos una vez al año y no me cabían las compras en las maletas, pero ahora la vaina está terrible…” y me preocupa porque cada vez que uno de nosotros abre la boca, lo hace en nombre de todos, y me asusto porque después de esa frase viene una sacudida como: “por eso no me he podido divorciar, es complicado porque tengo que dividir todo eso entre dos y ¿cuándo se vuelve uno a comprar todas sus cosas?” Me tomo la libertad de leer entre esas líneas, que usted vive y puede que comparta su cama y su cuerpo con una persona a quien no ama y tal vez aborrece, sólo por interés económico, por no tener la mitad, por no “ser” pobre y, ante esta hipótesis se me hace la imagen de la prostitución. Según RAE, Prostitución es la actividad de quien mantiene relaciones sexuales con otra persona a cambio de dinero (con el debido respeto a las personas que se dedican literalmente a este oficio).

De vez en cuando escucho relatos como: “yo no me complico, la paso bien, si me quiere regalar cosas, invitar a viajar o a comer, pagarme un tratamiento de estética, que lo haga, no le estoy obligando; paso el rato y ya, me imagino que esa persona está clara que nada que ver, no le estoy ofreciendo nada serio”. Ideas mías quizás, pero yo al escuchar eso pienso que usted es alguien que finge para que la otra persona se sienta complacida y le recompense con dinero, entonces, de inmediato, otra imagen de prostitución es la que percibo y, no sólo me llama la atención quien hace eso, sino quien deja que le traten así, ambos participan en este maltrato.

En estos días he estado atenta a aquellos “acuerdos” que hacemos para que alguien nos saque de este país, algunos dicen que se enamoraron con un par de sesiones de cyber-sex, otros engañan a una supuesta víctima que “cae” en el juego pero luego “se quita la careta” y es una persona violenta o decepcionante, otros pagan para casarse con alguien que luego reclama otros derechos que no estaban previstos, en fin, la imagen se repite.

Problemas así nos están pasando, pero le hablo a quienes desean que esto tenga un desenlace diferente, a quienes no se ponen a la defensiva con esta opinión sino que humildemente se ven reflejados en esto que sin haberlo deseado nos atrapa, a quienes dudan que algo así les haya sucedido o les esté sucediendo y a quienes se preocupan por los males individuales que producen calamidades colectivas… Sólo a ustedes les hablo, sólo a ustedes les aseguro que las cosas pueden cambiar y que una de las soluciones es buscar ayuda con un profesional de la Salud Mental.

Analeda Regalado Betancourt

@consultamental - Venezuela